El descanso

El sueño, una necesidad fisiológica del organismo para su restauración



los bebes necesitan mas horas de sueño
Para comprender las funciones del sueño en nuestro organismo, debemos conocer que existen dos tipos diferentes de sueño: El sueño  REM (Rapid Eye Movement) caracterizado por movimientos oculares rápidos y el sueño NREM (Non Rapid Eye Movement), que carece de este tipo de movimientos.



El sueño NREM se denomina  sueño reparador y está asociado a un descenso del tono vascular periférico, y a una disminución de la presión sanguínea, la frecuencia respiratoria y el metabolismo basal.
 Se divide a su vez en cuatro etapas relacionadas con los distintos grados de profundidad del sueño:


Primera etapa: Es la transición inicial de vigilia a sueño. Comienza con un descenso gradual de los signos vitales y del metabolismo, el cuerpo inicia una distensión muscular, la respiración se hace uniforme y la actividad cerebral se hace más lenta que durante el estado de vigilia.

Segunda etapa: Es la etapa del sueño ligero, el dormir se hace menos superficial, la actividad cerebral y los procesos orgánicos siguen decreciendo, la relajación aumenta.

Tercera etapa: Es una fase inicial de sueño profundo, es difícil despertar a la persona, los músculos están completamente relajados, los signos vitales disminuyen.


Cuarta etapa: Similar a la tercera, es la etapa de sueño más profundo, durante el cual el cuerpo descansa más. Se aumenta el flujo sanguíneo muscular y la secreción de hormona del crecimiento.




El sueño REM se caracteriza por movimientos oculares rápidos, la frecuencia cardiaca y la tensión arterial son fluctuantes y el flujo sanguíneo cerebral es similar al de vigilia, con marcada actividad neuronal y metabólica. Cuando la persona tiene mucho sueño, el REM dura poco y va aumentando a medida que descansa.



Cuando nos dormimos iniciamos el sueño en la etapa 1, que dura unos pocos minutos, seguido de etapa 2 y, posteriormente, pasamos a sueño profundo o lento, etapas 3 y 4. Este período de sueño NREM se sigue de un período REM, que en condiciones normales no debe aparecer hasta transcurridos 60 a 90 minutos del comienzo de la primera etapa. La alternancia sueño NREM sueño REM se sucede a lo largo de la noche formando ciclos que se repiten de 4 a 6 veces. Esta secuencia compone un ciclo de sueño.


Las investigaciones han demostrado que la duración del sueño no es lo que hace que luego nos sintamos frescos y despejados, sino el número de ciclos completos de sueño. Una persona que complete un solo ciclo (completar las 4 etapas), se sentirá más descansada que otra que incluso durmiendo más horas, no haya podido completar un ciclo.



Como hemos visto, nuestro cuerpo utiliza las horas de descanso profundo para liberar la hormona de crecimiento, que nos ayuda a regenerar tejidos, sanar heridas y completar diferentes procesos de renovación celular que suceden durante la noche. Cuando no descansamos correctamente, podemos pasar mucho más tiempo para recuperarnos de una herida física o una enfermedad, y nuestro cuerpo envejece más rápidamente.



los beneficios de descansar adecuadamente



Los beneficios de descansar adecuadamente son muy numerosos y aún no se han estudiado todos, pero en términos generales, se puede afirmar que:


Es el momento en el que el organismo tiende a regularse y acabar con el estrés sufrido a lo largo de la jornada.

Ayuda a mejorar el funcionamiento del sistema cardiovascular y el sistema inmunológico.

Controlar las infecciones y facilita la oxigenación de las células.

Es esencial para reforzar la memoria y el aprendizaje

Reduce el riesgo de hipertensión



Por el contrario, la falta de sueño puede perjudicar los sistemas inmunológico y nervioso; disminuye la capacidad de concentración y de enjuiciamiento dado que la vigilia prolongada va acompañada de trastorno progresivo de la mente. Nuestro cerebro necesita horas de ‘desconexión’ para poder procesar todos los datos acumulados durante el día. Un sueño suficiente y en buenas condiciones potencia nuestra capacidad de retentiva al despertar y ayuda a mejorar los procesos racionales.


         Para lograr un buen descanso se recomienda:

La habitación debe ventilarse a diario y tener una temperatura media

Duerme a oscuras, evita las luces led dentro del dormitorio. Una habitación oscura es necesaria para regular el sistema hormonal que induce al estado de relajamiento y somnolencia.

Evitar  ruidos y aparatos electrónicos en tu lugar de descanso como: móviles, PCs o televisores.

No realizar cenas fuertes y copiosas que hagan la digestión más pesada, ni tampoco acostarse con hambre.


Procura no utilizar el dormitorio para trabajar, es tu lugar de descanso.

Dormir, soñar, descandar

"Si es bueno vivir, todavía es mejor soñar, y lo mejor de todo, despertar."

Antonio Machado